La Ley Celaá, acumula una serie de paradojas sobre el exceso de sus justificaciones, entre las cuales las relativas a las competencias. Y es que, van desde la relación de autonomía y dirección de los centros, hasta la limitación a los diferentes sectores de la comunidad educativa; la reducción de competencias y su reparto destacando la atribución consecuente de las competencias curriculares, favoreciendo las desigualdades.

Sobre las competencias educativas, particularmente, la curricular en materias tales como la lengua nativa, lenguas cooficiales, idioma castellano,  los auxiliares de la conversación, la enseñanza de lengua extranjera, como el inglés…y la decisión unilateral del alumnado para cursar la materia de religión, y así, diversos temas que quedan abiertos, con lagunas jurídicas exclamamos atención.

Competencias por concretar

La LOMLOE deja algunas medidas reguladoras a los centros educativos incurriendo en lagunas jurídicas por falta de reglamentación sobre la materia; por ejemplo, el porcentaje de horas destinadas a las clases será decidido por cada colegio, generando expectativa sobre el alcance de su cumplimiento; asimismo, la garantía de su justa aplicación, el uso discrecional de la autonomía por los colegios y su sano control, que entendemos es responsabilidad del Estado. 

Control o descontrol

Con las modificaciones impulsadas por la LOMLOE, se debe entender la necesidad del sano control que estamos citando como atribución del Estado en aras de garantizar la realización de los derechos a la educación, Y realmente no es un asunto de creer o de confiar, que, como principio de la buena fe, ya que se trata de una temática de atribuciones y responsabilidades propias de los agentes del Estado.

Causan curiosidad los términos del Artículo 6º relativos al desarrollo y gestión de los programas por parte de las administraciones educativas. Asunto que, aclaremos, no trata de reforzar el papel contralor del Gobierno, sino de la importancia de explicar una redacción tan complicada.

Asociado a los recursos económicos, éstos serán distribuidos de conformidad con la singularidad de los programas con base en la igualdad de oportunidades; el volumen de alumnado escolarizado, en correspondencia con los objetivos del programa en los centros públicos y en los privados concertados; igualmente, abarca las zonas rurales y las zonas urbanas desfavorecidas socialmente. ¿ Es una suerte de “sistema simple para la elaboración de frases técnicas? ¿O un verdadero apuro por promulgar la referida Ley?

Justificaciones 

Los argumentos expuesto a través de la LOMLOE, se sustentan en la relación de autonomía y dirección de los centros, y además, alega la limitación contemplada en la LOMCE de los diferentes sectores de la comunidad educativa; la reducción de sus competencias; la de exponer que la dirección escolar estaba supeditada a un mayor control de la Administración educativa, extendiéndose hacia el hecho que la LOMCE favoreció un aumento de las desigualdades al ocasionar una ruptura al equilibrio establecido “por leyes anteriores”, las cuales no indica, enfatizando sobre la atribución correspondiente a las competencias curriculares, en clara alusión a la lengua cooficial.

Expone, además, que ello limitaba la capacidad de las decisiones de las Comunidades Autónomas en la regulación de las materias, metodologías, evaluaciones diagnósticas, ordenación de enseñanzas, promoción… 

Por lo tanto, es recomendable investigar las imprevistas consecuencias que tendrá esta Ley cuando de su aplicación se trate. En artículos precedentes se comentaba la preocupación por un contenido jurídico redactado con premura, producto de la cual se incurre en dislates, omisiones, confusiones… timos y gazapos generadores de dilemas y no menos dificultades al tratar de implementar su implantación, cumplimiento y su alcance. 

Es por ello imprescindible saber qué modificaciones requería la LOE;   profundizar  en los temas señalados, así como en el tema de las competencias para determinar si se trata, por una parte, del reparto o la reducción de competencias, sí es una estrategia para un ejercicio de control flexible, o si ello ocasionará un descontrol porque alega que se modernizará  la educación en España.